Esta instalación es un proyecto de magnitudes gigantescas en el cual Conergy ha desempeñado un papel destacado como proveedor oficial.
El desafío de desarrollar este proyecto en un país que presenta diversas dificultades climáticas eleva esta obra a la categoría impresionante.
Con su implementación, se logrará la apertura total de la República Checa al mundo de las energías renovables, representando un gran paso hacia la sostenibilidad y el acercamiento a otras modalidades catalogadas como “verdes”, las cuales han sido ampliamente aceptadas en este país centroeuropeo.
Por todas estas razones, esta instalación fotovoltaica se convierte en el mayor huerto solar jamás realizado en suelo checo, marcando un hito en la historia del país.